MARINA AGRAZ · @marinaagraz | Maria Bolari es diputada de Syriza en el Parlamento griego y estuvo en Sevilla la semana pasada con motivo de una jornada internacional organizada por la agrupación política Izquierda Anticapitalista de Sevilla. El objetivo: organizar un espacio de encuentro para ver cómo continuar la presión en la calle tras la Huelga General del pasado 14 de noviembre.
En el acto, también intervinieron Rodrigo Rivero, del Bloco de Esquerda de Portugal, María García Bueno del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) y Lisardo Baena, militante de la agrupación Anticapitalista. Hablamos con María Bolari tras el mitin para entender mejor qué está ocurriendo en Grecia y qué papel juega SYRIZA en el panorama político griego.
María es hija de un trabajador comunista que tras la guerra civil en Grecia (1941-1950) pasó 15 años de exilios y cárceles. Las conversaciones sobre la izquierda y la clase obrera formaban parte de su vida cotidiana. Esta diputada de 49 años militante de Izquierda Internacionalista Obrera participa en política activamente desde que se dio cuenta de que en la sociedad había ricos y pobres y ella estaba en el bando de los que menos tenían. Decidió luchar por sus derechos y los de quienes son como ella. Le indignaba la injusticia. A día de hoy le sigue indignando y entendió pronto que es a través de la organización como se consiguen resultados.
MARINA AGRAZ: El gobierno conservador ocultó el porcentaje de déficit real que tenía Grecia y que luego el gobierno de Papandreu reveló que estaba en más de un 12%, estando en el 3% el límite marcado por el Tratado de Maastrich. Hoy Nueva Democracia es la primera fuerza política. ¿Cómo analizan esto desde la coalición por la que usted es diputada?
MARÍA BOLARI: Bueno, primero habría que decir que han ganado por muy poca diferencia, por un 3% de diferencia. Han utilizado todas sus armas para atemorizar a la gente, para demostrar a la gente que si llega al gobierno Syriza se producirá una bancarrota absoluta y se morirán de hambre en la calle. Un ejemplo, para que te des cuenta del nivel de abuso al que han llegado los directivos de los bancos. Llamaban a los empleados y les decían si votáis, si sale un gobierno de izquierda vais a perder vuestro trabajo. Han llegado a ese nivel. Pero aún así el margen es del 3%, es una diferencia muy pequeña y por culpa también de la Ley Electoral, que da 50 escaños al primer partido, al que haya obtenido mejor resultado. También ha hecho falta la cooperación del partido socialista y de un partido más pequeño, Izquierda Democrática (DIMAR).
¿Llevarían a cabo la quita de la deuda?
La quita de la deuda no es sólo una posibilidad sino que es algo que se puede hacer, es una capacidad, podemos hacerlo.
La cuestión es si Grecia puede hacerlo con la Troika en medio, ¿en qué situación se vería Grecia?
Nosotros no decimos, ni creemos que vaya a ser una batalla fácil. No va a ser una batalla fácil. Pero hay que entender también que la UE y el Fondo Monetario intentan financiar a Grecia no para salvar a los griegos sino para salvar a los bancos griegos y europeos, para asegurarse de que Grecia seguirá pagando la deuda y es obvio que esta deuda no se puede pagar, precisamente porque existe la crisis, una crisis que es la crisis del capital también, de los capitalistas también. La clase dominante tanto en Grecia como en el resto de Europa no quiere este tipo de soluciones, no quiere un gobierno de izquierda en Grecia. Es posible que paren de financiar y si llegamos a este momento no habrá ningún tipo de negociación, no vamos a pagar nada, no vamos a devolver nada a quienes deben el impago porque ese dinero es una necesidad para la sociedad griega y pensamos que nuestro ejemplo va a empujar en una dirección más reivindicativa en toda Europa, en los movimientos de Europa, porque verán que nosotros seremos capaces de hacerlo y por ello hacen todo lo posible para que no tengamos un gobierno de izquierda en Grecia.
Son la segunda fuerza, ¿cuál es su papel?
Nuestro papel principal en el parlamento como la segunda fuerza es revelar la naturaleza de las medidas que se están tomando, porque el Gobierno lo que intenta es enmascarar las medidas, presentarlas a la gente como si fuesen algo muy bueno. Segundo, llevar al Parlamento el sentimiento de la gente que está fuera manifestándose y en tercer lugar lo que intentamos, y conseguimos hacer en muchas ocasiones, es poner problemas en las votaciones cuando el gobierno intenta pasar un artículo o alguna reforma más pequeña. Lo que conseguimos es bloquear algunos de estos artículos. En la votación del tercer memorándum, el partido en el Gobierno tuvo pérdidas, es decir, que hubo diputados de este partido que no lo apoyaron y esto es fruto de la presión de la calle, pero también de la presión de los diputados de Syriza.
Los países del sur de Europa estamos atravesando crisis similares y uno de los problemas comunes es el desempleo. ¿Los trabajadores del sur son más vagos o existe una tendencia hacia abaratar la mano de obra para competir en el mercado global con los productos de China o India?
Claro que no somos vagos, tenemos estadísticas que indican que Grecia es el segundo país de la Eurozona en el que más horas se trabaja por semana, según datos oficiales. Y algo parecido ocurre aquí. Los países del sur somos la parte de la cadena más débil de Europa, pero es cierto que tanto en el sur como en el resto de países como Alemania o Francia lo que se intenta hacer es acabar con los todos los derechos conseguidos tras la II GM, incluidos los derechos laborales.
Decía durante el mitin que hay mucha gente que no secundó la Huelga General por la precariedad laboral y el miedo a ser despedidos. ¿Qué herramientas cree que tienen aquellos que pasan por esa situación para defender sus derechos?
Se puede participar en manifestaciones que no tienen porqué ser parte de una huelga, o también impedir que aquellos lleguen a su trabajo porque se consiga paralizar un sector entero, o participar en movimientos contra los desahucios, como los que se hacen aquí, o en otros movimientos a los que sumarse en el tiempo libre. Votar no es la única manera de participar en política. Puedes participar en redes de solidaridad, en ambulatorios sociales, dar clases a inmigrantes…
Y cuáles son las estrategias que plantea Syriza para la creación de empleo, ¿Están en la línea del productivismo o, al contrario, se sitúan en el decrecimiento y en la apuesta por empleos verdes, como plantean desde la ecología política agrupaciones en Alemania y en España?
Desde Syriza intentaremos invertir en el sector público, invertir en la productividad teniendo en cuenta también la protección del medio ambiente. En mi opinión no existe un modelo ecológico, una manera verde de combatir el desempleo, pero seguramente sí es posible una forma de aumentar la productividad teniendo en cuenta la protección del medio ambiente. Grecia es un país rico en materias primas, en carbón, en oro. Salen unos metales bastante caros y raros en Grecia y el gobierno está vendiendo, está privatizando, las empresas que extraen estos minerales. Un gobierno de izquierda lo que va a hacer es nacionalizar otra vez este tipo de explotaciones, así creará puestos de trabajo pero tomando medidas para la protección del medio ambiente. Otro ejemplo, Grecia ahora invierte mucho en energía solar, pero el criterio desde el que se hacen estas inversiones es el beneficio de las empresas. La manera en la que se aplica en la realidad esa inversión solamente tiene en cuenta sacar más beneficio para esas empresas. Crean muy pocos puestos de trabajo y destruyen el medio ambiente alrededor de la instalación. Muchos agricultores, por ejemplo, no cultivan sus tierras y deciden plantar en lugar de plantas, paneles fotovoltaicos. Esto no es ni verde ni social.
Más de lo mismo. Socialdemocracia productivista.
ResponderEliminarNo hay futuro económico si no es ecológico y socialista.
Para nada es mas de lo mismo, es una alternativa de izquierda que está unida, no como en españa y que abogando por el impago de la deuda es la segunda fuerza. Necesitamos una Syriza en España.
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